Por Emiliano Basile
Estamos a final de la década del '70 y Sylvester Stallone está en su período de mayor reconocimiento de la crítica. Viene de ganar un Oscar en 1977 por el guión de Rocky (1976) y todavía no es el héroe de acción pochoclero que construiría en los años '80 y '90.
Estamos a final de la década del '70 y Sylvester Stallone está en su período de mayor reconocimiento de la crítica. Viene de ganar un Oscar en 1977 por el guión de Rocky (1976) y todavía no es el héroe de acción pochoclero que construiría en los años '80 y '90.Tales razones posibilitan que el creador de Rocky Balboa se introduzca en dos proyectos dramáticos que serían fracasos de público pero, paradójicamente, de gran nivel. El primero es La taberna del infierno (Paradise Alley, 1978) dirigido por el mismo Stallone, y F.I.S.T (1978) dirigida por el aclamado director Norman Jewison.
F.I.S.T es la historia de un sindicalista camionero (con tanta connotación hoy en día en la Argentina) que adquiere popularidad entre los obreros a base de ideales, pero luego tendrá que codearse con el poder, hecho que pondrá en peligro su vida.
El sello Emerald edita F.I.S.T, uno de los mejores filmes que supo protagonizar Sylvester Stallone. Una oportunidad única para redescubrir esta película casi desconocida por éstos días.
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