Obra: "El castigo sin venganza" de Francisco Civit

Teatro: El Kafka - Lambaré 866
Funciones: Viernes 21 hs.



Autor: Lope de Vega
Versión y dirección: Francisco Civit
Intérpretes: Rodolfo Roca (Duque de Ferrara), Julián Pucheta (Conde Federico), Carla Solari (Aurora), Carolina Martín Ferro (Casandra), Sebastián Pajoni (Marqués Gonzaga de Mantua), Daniel Ridolfi (Batín), Fernando Arluna (Ricardo), Flor Calvo Reiriz (Lucrecia)

Por Rocío Mariel González

Civit lleva a escena esta obra de Lope de Vega en la que lo público y lo privado son puestos en crisis permanentemente. La trama nos expone el conflicto de una familia en el poder: el duque de Ferrara lleva una vida libertina y su hijo ilegítimo, Federico, no podrá heradar. Para remediar esta situación desposa a Casandra, con la esperanza de tener un hijo. Pero mientras parte a la guerra, Federico y Casandra se enamoran. A su regreso, debe remediar la situación.

La obra de Lope presenta para el espectador contemporáneo un problema: ya desde el vamos el registro en verso supone un ajuste. La puesta de Civit, completamente despojada, centra la atención permanentemente en el texto. Y he aquí la mayor dificultad: un teatro de palabra, donde todas las acciones y conflictos son pronunciados, pero donde esa palabra es árida.

Si bien los actores logran una perfecta dicción, y por un lado, se luce el esfuerzo de un texto pensado, estudiado, ensayado, por el otro, se transluce un anclaje a la palabra que impide la interacción entre los actores, cada uno preocupado por entregar sus líneas a la perfección.

El vestuario, prácticamente el único elemento teatral que puede funcionar como signo, además de la propia palabra y cuerpo actorales, remite a una estética entre los años '40 y '50. En este sentido, la obra carece de actualización. Si bien el director manifiesta en el programa de mano la contemporaneidad de Lope en relación la contradicción entre política y moral, este análisis no llega a profundizarse en la puesta en escena.

¿Qué parelelos podemos trazar entre El castigo sin venganza y nuestro presente? La obra de Civit deja esa pregunta demasiado librada a las conexiones que pueda realizar el espectador, sin proponer líneas de re-lectura. En este sentido, si bien es una obra prolija, bien ensayada y actuada, es decir, correcta, no da el paso siguiente.

Comentarios