Por Emiliano Basile
El Robin Hood que interpreta Errol Flynn responde a la iconografía del arquero del bosque de Sherwood por exelencia. El vestuario, la escenografía y el romanticismo con que la leyenda de Robin de Locksley se conoce quedaron catapultados para siempre en la historia del cine en este film de 1938.
El Robin Hood que interpreta Errol Flynn responde a la iconografía del arquero del bosque de Sherwood por exelencia. El vestuario, la escenografía y el romanticismo con que la leyenda de Robin de Locksley se conoce quedaron catapultados para siempre en la historia del cine en este film de 1938.Errol Flynn es el héroe romántico, aquel capaz de desafiar cara a cara al Rey, mientras “roba a los ricos para darle a los pobres” con la gracia y frescura necesaria como para ganarse la envidia de los señores feudales y conquistar a sus mujeres.
Realizada en Technicolor, Las aventuras de Robin Hood (The adventures of Robin Hood, 1938) fue la apuesta de los estudios Warner Bros para contrarrestar las producciones a color de otros estudios de la época, como El mago de Oz (The wizard of Oz, 1939) o Lo que el viento se llevó (Gone with the win, 1939). Robin Hood cuenta con su vestidura verde, su saco repleto de flechas cruzado sobre su espalda y su gorro punteagudo con una pluma sobre él, la iconografía perfecta del arquero que sobrevivió al paso del tiempo, se impuso en esta película.
Un claro ejemplo de ello es la parodia que Mel brooks realiza en 1993 sobre el legendario héroe del bosque llamada Las locas, locas aventuras de Robin Hood (Robin Hood: Men in thigs), con Cary Elwes en el papel de Robin cuya fugura correspone directamente a Errol Flynn más allá del éxito de la versión que Kevin Costner estrenara dos años antes, Robin Hood: Príncipe de los ladrones (Robin Hood: Prince of Thieves, 1991).
El sello Emerald edita esta clásica leyenda de Robin Hood junto al film El príncipe y el mendigo (The prince and the pauper, 1937), en un programa doble sobre Errol Flynn.
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